Reseña

¿Cómo contar la historia de un hombre? ¿Cómo contarla si ese hombre es un mito tejido por cientos de historias que se complementan, se contradicen y hasta se anulan entre sí?

Miguel Briante emprendió en “Kincón” la tarea brutal de reconstruir la vida de un hombre que fue leyenda en su infancia. Un extranjero que llegó de la selva del Mato Grosso a una comarca bonaerense y nunca dejó de ser un extraño. Un hombre que tiene muchos nombres propios, pero todos recuerdan por el apodo que lo convierte en un ser monstruoso e invencible. El hombre al que también llamaron “el negro”, que supo ser policía y delincuente; cazador y fugitivo, según pasaron los años y los gobiernos. “La imaginación de la gente, en estos pueblos, es feroz” se lee en esta novela y también se lee que Kincón no negaba a nadie la ventaja en un duelo y que atajaba balazos con su poncho y su rebenque, tanto a los 20 como a los 80 años, con la misma agilidad. 


¿Cómo contar la historia de un mito? Briante lo hace de a poco, como quién se interna en la selva y va descorriendo la vegetación para mirar o como quién se pierde en un maizal interminable de la pampa y avanza a tientas. Briante le da voz a los mal hablados, a los que nadie escucha, a los que todavía temen a Kincón porque desconfían que se haya muerto en ese último duelo de madrugada en el que enfrentó en la niebla a uno de sus fantasmas. Y también, en esa conversación que fluye en un aparente desorden a lo largo de 200 páginas, a veces se mete un muerto a contar su versión de los hechos, a iluminar la bruma del relato como si encendiera un cigarrillo en la noche e hiciera un agujero de luz en la oscuridad.

Hay que destacar la cuidadosa edición de Alto Pogo con ilustraciones que ambientan la lectura pero no la invaden, una novela tremenda para saborear despacio que invita a internarse en el resto de la literatura de Briante ¿Leyeron algo de este autor? ¿Qué me recomiendan para seguir conociéndolo?

Fuente: @libros.inutiles x Diego Gentile